TAMARA DI TELLA; LAS MANOS MAGICAS
Las top models, las actrices y las empresarios modelan sus cuerpos con ellos. Cientos de personas pasan al año por sus clínicas e institutos de estética. En qué consisten los tratamientos sin cirugía que dejan espléndidas a las mujeres famosas.
No son brujos, ni prometen soluciones mágicas. Sin embargo, ellos consiguen lo que para muchos puede parecer imposible: borrar los defectos que más acomplejan a las mujeres sin recurrir a la cirugía. Como modernos Pigma-liones, el doctor Carlos Pisanú, Adela Quevedo, la doctora Patricia Dermer y Támara Di Tella modelan los cuerpos de las más lindas porque conocen el secreto de la belleza. Por supuesto, no tienen problemas en revelarlo y, además, aseguran que todas pueden llegar espléndidas al verano, con la cola firme, sin celulitis, ni rollitos. Claro, eso si antes se deciden a hacer una vida más sana y a consultar con los expertos para garantizar los resultados soñados. Es que, como la medicina estética es una especialidad que mueve mucho dinero en todo el mundo, las ofertas truchas de soluciones milagrosas están a la orden del día y el precio de una mala elección puede ser muy alto. «Es indispensable ir a institutos confiables. Hoy, en medio de cierta neurosis estética, la gente se hace cirugías en cualquier parte o se automedica porque hay demasiados productos de venta libre. Se olvidan de que así ponen en peligro la salud», opina Patricia Dermer, doctora en química y directora de Lidherma, su laboratorio de investigaciones dermatológicas.
«Llegan los primeros calores de la primavera y lo único que ven las mujeres es su celulitis. Esos terribles pocitos en las piernas son el centro de toda su atención a la hora de ir a la playa. Es bueno que sepan que, aunque la celulitis no se cura, puede volverse imperceptible con un buen tratamiento», asegura Támara Di Tella. Por su Spa urbano -el primero del país- pasan empresarías víctimas del estrés y mujeres de diplomáticos en busca de masajes, sauna, limpieza de cutis o de talasoterapia, el exclusivo tratamiento con macrocystis, unas algas reductoras que Támara hace traer de los mares del sur. De todas sus pacientes, una de las más fieles es la aristocrática Teresita Radziwill, esposa de Carlos de Habsbur-go. Otra que pasó por el Spa fue Claudia Maradona, que quedó encantada con los masajes y las máscaras de barro.
Claro que, como todas las mujeres no son iguales, tampoco lo son las terapias. Gracias a sus veinticinco años de experiencia profesional, Adela Quevedo sabe que la atención personalizada es imprescindible:
«Una persona no es un rollo celulítico. Tiene características que la hacen única y lo que es la solución para una, tal vez no funcione en otra. Tengo pacientes desde los 15 a los 92 años de edad Así que hay que evaluarlas y explicarles que una buena dieta rica en fibras, vitaminas y hierro, beber dos litros de agua diarios y caminar entre 30 y 40 cuadras por día son gran parte del éxito del tratamiento de gimnasia pasiva, aplicación de geles reductores y afirmantes y masajes de drenaje linfático que hago». Algo que seguramente saben bien las top models que desfilan por su instituto y salen como nuevas. Aunque Adela prefiere no dar nombres, desde Carola Del Bianco hasta Araceli González o Bárbara Durand reconocen que tienen mucho que agradecerle a ella cuando llega la hora de mostrar las piernas en una pasarela. También a la clínica de medicina estética del doctor Carlos Pisanú llegan más de cincuenta mujeres por día en busca de auxilio. Pisanú encontró en la me-soterapia un arma eficaz contra el monstruo de la celulitis. Mediante la DHN3, una pistola francesa que parece salida de una película futurista, inyecta en los tejidos enzimas que atenúan el poceado celulítico y disuelven las grasas. «Esto es una novedad total en la Argentina. La mesote-rapia se aplica directamente en el lugar de la afección, es indolora y no deja marcas. Tampoco es necesario dedicarle mucho tiempo: con una sesión de entre 5 y 10 minutos por semana más una dieta equilibrada se logran excelentes resultados en tres meses porque se puede eliminar totalmente ese desagradable poceado que acompleja a las mujeres». ¿Quiénes son sus pacientes? Para Pisanú, como buen médico, el secreto profesional es inviolable. Sin embargo, en el ambiente artístico no es ningún secreto que muchas actrices y modelos (como Carolina Peleritti o Daniela Cardone) visitan su clínica de Belgrano. Para los casos que requieren una lipoaspira-ción, combina su trabajo con el de su hermano, el cirujano plástico Rolando Pisanú. Siempre se trabaja con una consulta previa en la que se hacen un diagnóstico y una historia clínica.
A pesar de este constante desfile de famosos por los institutos, es un error vincular las terapias estéticas con la frivolidad. «Eso pasa porque no se tiene en cuenta que la salud es la armonía entre el bienestar interior y el exterior, opina Patricia Der-mer. De todos los tratamientos que ofrece en Lidherma, el preferido por las mujeres de la high society y las chicas más lindas de Buenos Aires es la electroli-pólisis. «Sí, tiene un nombre complicado pero es muy efectivo. Se aplican unas agujas parecidas a las que se usan en acupuntura, por las que pasa una corriente eléctrica de muy baja frecuencia. Así se destruyen las células grasas. Los restos son eliminados por el propio organismo. Un método fácil e indoloro de una sesión semanal para reducir en menos de dos meses 6 centímetros en caderas y abdomen, 5 centímetros en los muslos y 2 centímetros en las rodillas. Después, hay que hacer un mantenimiento tres o cuatro veces al año».
Pensando en todas aquellas que no consigan estar en plena forma antes del verano y necesiten un service entre zambullida y zambullida en el mar, Támara Di Tella decidió trasladar algunos servicios de su Spa al Hotel Alge-ciras de Pinamar. «Sé que muchas van a venir para seguir con la talasoterapia o con el Cola 10, el tratamiento para endurecer y levantar los glúteos con pn aparato que contrae los músculos 2.700 veces por sesión. Es decir, el equivalente a 2.700 ejercicios de gimnasia localizada».
Aunque la ciencia desarrolló estos tratamientos shock que hacen que los músculos se tonifiquen y la celulitis se vuelva imperceptible, los especialistas con »manos mágicas» aclaran que el verdadero cambio comienza por la cabeza de las propias interesadas. La mayoría de las mujeres nunca terminan de aprender que lo mejor es cuidarse todo el año y no esperar a la primavera para acordarse del cuerpo. Puede ser muy odioso encontrarse frente al espejo con la imagen de una gordita con muslos blandos como flancitos. En ese momento de nada sirve sentir remordimientos por lo que no se hizo para evitarlo. Mucho menos, resignarse pensando que las que tienen piernas perfectas y la cola firme son elegidas de los dioses. Sin duda, es muy cómodo quedarse sentada a esperar un milagro, pero es mucho más efectivo empezar a trabajar para lograrlo.